Crónicas de Lecturas - 52
Geografía en la Historia: Jared Diamond y el Colapso de la Civilización
I
La Geografía, la Historia y Jared Diamond
El que estas líneas escribe es
profesor de Historia y también de Geografía. Separo acá lo que se supone va
junto porque hablamos de dos disciplinas muy diferentes que se reunieron para
conveniencia de la Universidad. La cosa se complicó con la introducción de las
áreas en la currícula escolar, lo que hace imposible que te puedas saber en
profundidad los elementos de todas esas otras disciplinas que se pretende que
enseñes: Folklore, Sociología, Arqueología, Prehistoria, Ecología, Axiología y
algunas más por ahí que se me olvidan. La única manera de tener un panorama de
todo eso es poseer sea un esquematismo espantoso o una erudición humanista
espectacular. A mí no me consideran un mal profe y aunque en boca propia la
pedantería es más pedante y la propia alabanza mayor locura – lo que denota la
necesidad de una fulminante y urgente búsqueda de ayuda profesional – debo
decir que ni siquiera yo soy capaz de
manejar todos los contenidos que se supone un profesor de Sociales debiera
manejar de acuerdo a la actual y vigente currícula escolar. Y ahí lo dejo y a
más no me atrevo a profundizar, que si critico mucho no me dan chamba.
El creciente doble proceso de
especialización e interdisciplinariedad en la ciencia (que bacán suena, para
que vean que uno sus conceptos se los maneja) ha quebrado algunas de las
asunciones de lo que solía ser la Ciencia y su enseñanza. Por ejemplo, la
separación entre Ciencias basada en sólidas divisiones lógico - metodológicas;
y por ende las tradicionales divisiones entre “científicos” y “legos”, y entre
“profesionales” e “investigadores”; el surgimiento de especialidades con objetos
de estudio cada vez más acotados, y no quiere decir eso que haya menos contenidos
que aprender, que si se acota el objeto de estudio es por el contrario porque
hay cada vez más “bits” de información que asimilar, se ha desatado la
investigación de tal manera que el incremento de la cantidad de data a asimilar
y pasar por los tamices del método crece de modo exponencial hasta límites
asintóticos. Se ha escrito mucho al efecto, una buena introducción para los
interesados la encontrarán en el clásico de Gunther Stent de los años ´70, Las
paradojas del progreso; y un buen desarrollo en Claves Ciertas, de Gerald
Feinberg en los ´80, que en su última parte analiza los modelos “futuros” (un
futuro que es ya nuestro presente) del desarrollo de la Ciencia.
Las disciplinas de la Geografía y
la Historia desde mucho atrás son cercanas, es que siempre fueron vecinas. Ya
hemos visto en otra Crónica cómo el Viajero puede interpretar lo que ve como
Historia y contarlo así, como acontecimientos que tienen lugar en ciertas
coordenadas espaciales. Separar metodológicamente Historia de Geografía redundó
eso sí en provincialismo, empobrecimiento y un espantoso esquematismo. Menos
mal nuevos vientos corrieron: La escuela
de los Annales le dio nuevo vigor a la Historia al vincularla a la
Geografía y otras Ciencias Sociales, un librito formidable para leer al
respecto es La Historia y las Ciencias
Sociales de Fernand Braudel. La Geografía incorpora el factor
tiempo, tanto en la sincronía “geológica” que explica el paisaje físico, como
en la diacronía que presenta la Geografía Humana de un espacio determinado a
partir de su pasado. Todo esto se presta a afirmaciones contundentes y espectaculares,
titulares periodísticos y best-sellers editoriales.
Y este es el contexto del autor que cronicamos hoy, Jared Mason Diamond, un no - historiador que discute un tema
histórico de profunda actualidad, que además vende muchos libros: La no tan
eventual posibilidad de extinción del ser humano y/o de sus tramas civilizadas.
Este hecho no es precisamente un fenómeno desconocido. Y para eximirnos de
explicar la base del pensamiento de Diamond,
veamos este Video TED, y a continuación desarrollaremos su pensamiento expresado
en sus libros;
II
Colapso: Por qué unas sociedades perduran y otras desaparecen (I)
A Jared Diamond le dan o mucha bola o ninguna, según el área
académica. No es ningún charlatán, el hombre tiene su doctorado de Cambridge,
pero como no es historiador le es posible a alguno de tres por cuatro (o del
codo a la mano, me encantan esas metáforas) mirarlo por sobre el hombro o desde
la cumbre de la especialidad, con el desprecio que el especialista le otorga al
lego; en particular cuando el tal lego viene del área de “ciencias”. La
distinción entre “letras” y “ciencias” siempre me ha parecido de lo más
estúpida, propia de mentalidades coloniales y subdesarrolladas. Lo propio son
las Ciencias Fácticas y las Ciencias Sociales (O Humanidades tal vez) y tal
como están las cosas hoy en día, no es rentable diferenciarlas. Pero lo esencial
acá es que la Historia y la Geografía – en el caso de Diamond la Biología, la Fisiología y la Biogeografía – son todas
Ciencias, y del mismo modo que sabemos y consideramos que los árboles y
nosotros estamos igualmente “vivos”, aunque seamos muy diferentes, es que esos
conjuntos de proposiciones ordenados desde diferentes perspectivas y con
diferentes bases obedecen todas al mismo método, si bien aplicado a diferentes
objetos. Pero es que hay competencia en el mundo académico como lo hay en todo,
y cuando se trata del quítate tú para
ponerme yo se olvida el fair play.
Jared Diamond es merecidamente
conocido porque sus tesis empatan con las Tres Condiciones Aristotélicas:
Convencen racionalmente, apelan a nuestro sentimiento o sensación de
supervivencia y, por último, se le puede creer. El ser humano está tan unido a
su Civilización que salvo en los remotos extramuros de la Cultura Occidental –
los Lejanos Oriente y Occidente de hoy en día – no se le puede entender fuera
de dicha trama social. Todos somos conscientes de uno u otro modo que somos parte
de una Civilización Global que enfrenta un colapso también global. Tal
perspectiva nos angustia y da miedo, y estamos dispuestos a prestar oído a los
que nos muestren rutas para conocer mejor a ese demonio y exorcizarlo.
La perspectiva desde la que Jared Diamond aborda estos cruciales
problemas no es mística ni metafísica, se acerca más bien a un materialismo
cultural light, que deja espacio a la
toma de decisiones al interior de cada sociedad. No desconoce sin embargo la
persistencia de las poderosas fuerzas contrarias al cambio, a las que atribuye
la dificultad para adaptarse a las circunstancias cambiantes, pero no le es
posible librarse de un cierto tono subyacente de prescripción propio de un Gurú
o Consultor caro. En su obra de 2004, Colapso:
Por qué unas sociedades perduran y otras desaparecen que siguió al Pulitzer Armas,
Gérmenes y Acero de 1997 trataba más o menos los mismos temas, las causas o
factores materiales en la evolución ecológica, es decir cómo una sociedad es
tanto más estable cuánto más adaptada esté a su medio ambiente, mientras tome
los recursos de éste de modo eficiente. Lo complejo es distinguir lo que ocurre
en las circunstancias históricas, que son lo que quieras menos regulares
empíricamente. Las irrupciones sociales y políticas exteriores a la sociedad en
estudio (la conquista del Perú por los españoles es un buen ejemplo), los cambios
tecnológicos y las influencias culturales, comerciales, biológicas y de otros
órdenes pueden resultar decisivas para que una sociedad entre en Colapso. El libro de este título se
divide en cuatro secciones: En la primera hay un estudio de caso:
La evolución del medio ambiente, la economía y la sociedad del estado de
Montana. En la segunda describe sociedades colapsadas: Isla de Pascua (Rapa
Nui) por degradación medioambiental provocada; isla de Pitcairn por crecimiento
demográfico; los Anasazi del suroeste de
USA por cambio climático; los mayas del Petén y Yucatán por daño medioambiental
y vecinos hostiles; la de los vikingos de Groenlandia y América por rechazo al
cambio. Claro que la cosa no es tan esquemática como la presento, los factores no
operan solos sino dentro de un conjunto desigual, Diamond identifica cinco factores: Cambio climático, vecinos
hostiles o invasión, pérdida del
intercambio comercial, y respuestas
culturales inadecuadas a los nuevos retos. Y así como discute colapsos,
discute también los éxitos de Tikopa, Nueva Guinea y el Japón de la era
Tokugawa. En la tercera parte, se repasan sociedades y circunstancias modernas:
El genocidio en Ruanda, Haití comparada con la república Dominicana, la
situación de China y la de Australia. Por último, en la cuarta parte hace
consideraciones sobre la economía y la globalización, y las lecciones que toda
sociedad debería aprender.
III
Colapso: Por qué unas sociedades perduran y otras desaparecen (II)
El objetivo de la historia – dice
Pierre Vilar - no es “revivir el
pasado”, sino comprenderlo en el proceso mismo de re-escribirlo. Esto se logra
ejecutando ciertas operaciones intelectuales, empezando por la evaluación y revisión
de los conceptos primarios y los métodos que se usaron, lo que desemboca en su
reemplazo o reformulación. El Colapso no equivale a la extinción o desaparición
física, aunque la extinción sea caso extremo del colapso. Pero no equivale
necesariamente a destrucción, aunque eventualmente pueda haber hechos y
estructuras de la realidad que terminen por ser destruidos de modo inmediato o
mediato, un tanto al modo de las inversiones del mundo (pachacuti) propias de la cultura andina. La Historia del Perú
ofrece ejemplos que sorprende que Diamond
no haya estudiado – o lo ha hecho y lo ignoro. Mi país parece un laboratorio
del colapso: Nuestros historiadores y arqueólogos, inspirados o no en Diamond, han construido ideas propias
sobre el colapso de las sociedades. En el Perú hemos visto varios de estos
colapsos, que desde la Cultura Andino-Amazónica entendemos como “inversiones
del orden natural de las cosas”, concepto designado en runa-simi como pachacuti.
Por cierto, así como van las cosas es perfectamente posible que veamos algunos
otros de esos pachacuti. Un ejemplo bien
estudiado es el de las Sociedades de los Valles del Norte Peruano (del Bosque
Seco Ecuatorial) que incluyen a las llamadas Culturas Cupisnique, Virú,
Gallinazo, Moche, Lambayeque y Chimú. La civilización de los moches colapsó
hacia 800 después de Cristo, lo que se atribuye a un Mega Fenómeno del Niño que
trastocó toda la trama social, económica, política y religiosa; que a su vez
trajo una reducción demográfica, pero no la extinción física ni cultural. Otro
colapso se produjo en el Tahuantinsuyo, esta vez por la llegada de los
españoles portadores de los microorganismos del Viejo Mundo, con lo que una
población de 8 / 12 millones se redujo a medio millón en 150 años. Desde la
irrupción de Occidente hacemos en el Perú muchas de esas cosas que según Jared Diamond llevan al colapso, lo que
a mi ver demuestra que nuestros antepasados indios eran bastante más sensatos e
inteligentes que nosotros. Aplicar los conocimientos siempre es bueno, y dado
que Diamond ubica los factores
precisos que nos llevan a la perdición, podemos tratar de evitarlos aunque sea
en perspectiva limitada por el espacio disponible, en una prognosis del futuro
que guíe nuestra acción política y educativa. Hagamos la tarea:
Factores del Colapso de las Sociedades
|
Prognosis (digamos al 2050)
|
|
Positiva
|
Negativa
|
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Deforestación
y Destrucción del hábitat
|
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Erosión, salinización
y pérdida de fertilidad de los suelos
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Caza
excesiva
|
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Pesca
excesiva
|
||
Introducción
de especies nuevas en medio ambiente
|
||
Crecimiento
demográfico humano
|
||
Incremento
del impacto per capita en el
medioambiente
|
Los grandes cambios producidos a
nivel global desde la revolución Industrial sugieren nuevos factores del
Colapso:
Prognosis (Digamos al 2050)
|
||
Positiva
|
Negativa
|
|
Cambios
Climáticos forzados por el ser humano
|
||
Acumulación
de químicos tóxicos en el medioambiente
|
||
Escasez
de energía por consumo excesivo
|
||
Uso
de toda la capacidad fotosintética del planeta Tierra
|
Afortunadamente este libro lo
podemos poner al alcance de todos, aunque me pregunto si no estaré por ahí
haciendo algo ilegal. Pero si es por una buena causa….:
IV
Armas, Gérmenes y Acero, y la
autoestima nacional
Un libro de lo más interesante y
anterior al best-seller Colapso es el
que mencionamos líneas arriba: Armas,
Gérmenes y Acero, donde Jared
Diamond hace análisis del progreso de las diferentes civilizaciones del
mundo. Claro que decir progreso en este contexto es bastante equívoco, y podría
confundirse con los excesos positivistas decimonónicos. Como hemos visto, no es
esto lo que Diamond hace, que una
cosa es descubrir empíricamente un proceso caracterizado por el progreso, sea
éste lo que sea, y otra cosa muy diferente es recurrir a la noción de progreso
como estructura permanente, leit-motiv
o deus ex máchina de los procesos de
la Historia. Pareciera que esto se transparentara de algún modo en el título
alterno de este libro: Una corta historia de todos nosotros en los
últimos 13,000 años. De lo que se trata es de tratar de explicar algo
que a nosotros en el Perú nos trae hinchados: Por qué una supercivilización cae
en manos de otra. Esto porque la autoestima nacional – cosa muy presente – sufre
con esta declaración de inferioridad patente. En la expansión de Occidente
desde el siglo XVI en adelante, ellos
se encontraron con nosotros y, nos
guste o no nos hicieron cisco, perdimos por cualquier concepto que tratemos de
emplear, sin premio consuelo posible, y este
hecho, sea o no consciente, nos joroba en el alma. Y por más que a los
mexicanos les pasara lo mismo, pues que ídem, mal de muchos consuelo de idiotas.
Así que tratamos de mantenernos entre dos aguas, por una parte sosteniendo la
pertinencia de la “visión del vencido” que trata de “rescatar” los valores que “no
debieron” perderse –pero que se perdieron; y por la otra identificándose con el
agresor, marcando la parte europea u occidental de nuestra herencia étnica y/o
cultural, un poco por el temor de perder universalidad si somos demasiado
localistas.
Pero en esto corremos demasiado. Ya
mencionamos la importancia de la agresión microbiana en los Andes Centrales, y
podemos añadir que el Caribe, México y la Norteamérica indígena fueron
despobladas y debilitadas antes y durante el proceso de conquista y
colonización de los europeos en esta parte del mundo. Ello constituye en cierto
modo una especie de disculpa, de justificación de por qué fuimos derrotados, conquistados
y asimilados. Pero menos mal Jared Diamond no está en esta dinámica, así puede
él arrancar mucho más atrás y comparar el devenir de los pueblos de las dos
grandes masas geográficas que conforman la superficie emergida de este planeta
en donde tiene lugar la humanidad: Eurasiáfrica y América. La pretendida hegemonía
euroasiática basada en la Genética o el desarrollo intelectual es criticada por
Diamond como ideológica. El hecho es más simple: Eurasiáfrica es más extensa. Posee
mayor proporción de especies vegetales y animales. Las barreras a la expansión
de la revolución neolítica fueron mucho menores que en América. La ganadería conoció
mayor desarrollo por haber mayor cantidad de especies qué domesticar, y como
consecuencia indirecta los euroasiafricanos adquirieron mayor resistencia a las
enfermedades.
Podemos encontrar este libro en: http://www.libro-s.com/l/armas-germenes-y-acero-de-jared-diamond-137561/
V
Colofón
No nos sorprende demasiado que a Diamond no se le haya dado demasiada
bola en el Perú. Acá en dicho aspecto preponderan las carreras de “letras” pues
sus profesionales tienden a ser mejor articulados que los de las llamadas
“Ciencias”. Y los celos suelen ser terribles. Claro que esto lo único que hace
es manifestar la estructura del ghetto
a la que estamos acostumbrados. Pero de qué sirve leer si no te lleva a la
acción. Así que lee lo que quieras.
Y actúa.
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